Niña rusa patea a su profesor
En Rusia el nivel que deben tener los estudiantes es muy alto, es por eso que sus profesores son muy exigentes, quizás incluso demasiado estrictos.
Aquí tenemos un ejemplo de lo que allí sucede, en el caso de esta niña, la cual se encontraba en su habitual clase de inglés y a la que se le ve claramente lo nerviosa que está por no saber responder a lo que le pide su profesor, que le insiste gritándole una y otra vez.
La pobre niña se ve un tanto atemorizada y cohibida ante la gran bronca del profesor, se puede apreciar que la niña lo único que quiere es que termine la reprimenda cuanto antes, pero el profesor no está por la labor que lejos de ir calmándose lo que ocurre es que parece que cada vez se anima más elevando la voz y haciendo todo tipo de aspavientos. Mientras tanto el resto de los niños observan callados sin atreverse ni a moverse, temiendo a correr la misma suerte.
Y es que para enseñar y educar no es necesario emplear la intimidación, ni implantar temor, sino respeto. Esperemos que este maestro no vuelva a utilizar estas técnicas, aunque con esta niña seguro que no.
Aquí tenemos un ejemplo de lo que allí sucede, en el caso de esta niña, la cual se encontraba en su habitual clase de inglés y a la que se le ve claramente lo nerviosa que está por no saber responder a lo que le pide su profesor, que le insiste gritándole una y otra vez.
Y es que para enseñar y educar no es necesario emplear la intimidación, ni implantar temor, sino respeto. Esperemos que este maestro no vuelva a utilizar estas técnicas, aunque con esta niña seguro que no.
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- Unknown
En Rusia el nivel que deben tener los estudiantes es muy alto, es por eso que sus profesores son muy exigentes, quizás incluso demasiado estrictos.
Aquí tenemos un ejemplo de lo que allí sucede, en el caso de esta niña, la cual se encontraba en su habitual clase de inglés y a la que se le ve claramente lo nerviosa que está por no saber responder a lo que le pide su profesor, que le insiste gritándole una y otra vez.
Y es que para enseñar y educar no es necesario emplear la intimidación, ni implantar temor, sino respeto. Esperemos que este maestro no vuelva a utilizar estas técnicas, aunque con esta niña seguro que no.
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